La puesta en marcha de la línea de alta velocidad ferroviaria entre Alicante y Madrid no va a representar, en principio, un ahorro tan importante de tiempo en los viajes en tren a la capital de España y, además, estará, de entrada, muy lejos de los 100 minutos de viaje que anunció el entonces ministro de Fomento, Rafael Arias-Salgado, el 27 de septiembre de 1999.
La necesidad de adaptar la circulación de los AVE al nuevo sistema de señalización y seguridad del tramo Alicante-Albacete, provocará que los trenes necesiten 2 horas y 30 minutos para cubrir el servicio (500 kilómetros de longitud), sólo 35 minutos menos que el tiempo que necesitan los actuales Alvia - 3 horas y 05 minutos-, en concreto el que sale de Alicante a las 12 horas y llega Atocha a las 15.05 horas. Un tiempo de viaje que, según el Ministerio de Fomento, bajará a las 2 horas y 15 minutos a partir de final de año, cuando ya esté testado el sistema de seguridad.
La longitud del tramo ferroviario entre Alicante y Madrid es de 500 kilómetros, al haberse adoptado en su día el corredor por Cuenca. La distancia por carretera son 420 kilómetros que se cubren en 4 horas, siempre que se respete el límite de velocidad y no haya retenciones.
Atrás queda ya aquél 27 de septiembre de 1999, cuando el ministro Arias-Salgado anunciaba, tras un cena con Eduardo Zaplana (Generalitat Valenciana); José Bono (Castilla-La Mancha) y Alberto Ruiz-Gallardón (Madrid) en el Palacio de Zurbano, que el objetivo era llegar al Mediterráneo desde Madrid en 100 minutos, 1 hora y 40 minutos, según se plasmó negro sobre blanco en el informe realizado por el Ministerio de Fomento en el que se barajaron los diferentes trazados. Un tiempo de viaje en base a servicios directos, algo que a día de hoy, nadie conoce tampoco en Alicante, ya que Renfe, la operadora del AVE, no ha decidido todavía los precios.
El AVE entre Alicante y Madrid parará desde el primer día en Villena (compromiso del Ministerio con los empresarios y el Ayuntamiento) y en Albacete, y tardará, por lo tanto, 2 horas y 30 minutos -2 horas 15 minutos es el objetivo final- en cubrir los 500 kilómetros de corredor, ya que el trazado lleva al tren por Cuenca, donde, también está previsto que pare algún tren, algo que aumentará el tiempo de viaje. Todo está a expensas de la oferta de trenes de Renfe que, salvo sorpresa, no se va a comenzar a comercializar hasta primeros de junio.
Un tiempo de viaje que, de momento, no satisface a nadie, como se hizo patente durante la reunión de coordinación mantenida anteayer por la Administración y los empresarios en Alicante, y en la que apuntó que un tiempo de viaje competitivo serían las 2 horas y 10 minutos. Hoy, los Alvia que conectan Alicante con Madrid emplean entre 3 horas y 5 minutos, y 3 horas y 20 minutos (parada en Cuenca) para llegar a Atocha. Los 100 minutos de Arias-Salgado sí se han logrado en el servicio directo Valencia-Madrid -1 hora 38 minutos-.
En cuanto a los AVE que circulan entre Málaga y Alicante, el tiempo de viaje oscila entre las 2 horas y 25 minutos y las 2 horas y 50 minutos.
En cuanto a las tarifas, Renfe sigue sin desvelarlas ni las ofertas con las que arrancará la línea, El precio oficial del viaje en AVE oscila entre los 0,15 y los 0,18 euros el kilómetro, por lo que, en principio estaría entre los 70 y los 90 euros. A partir de ahí, el asunto queda en manos de la dirección comercial de Renfe.
La alta velocidad entre Madrid y la Comunidad Valenciana ha costado 9.000 millones de euros.
"El debate entre Castedo y Gema Amor no se tenía que haber producido".
La presidenta de la Diputación, Luisa Pastor, se pronunció ayer por primera vez sobre las críticas cruzadas que se han lanzado durante los últimos días la alcaldesa de Alicante, Sonia Castedo, y la concejal de Turismo de Benidorm, Gema Amor, a cuenta de la llegada del AVE. "Ese debate no se tenía que haber producido", sentenció la presidenta a preguntas de este diario. La titular de la institución provincial censuró así el conflicto entre ambas.
Mientras Amor defiende autobuses lanzadera que trasladen directamente a Benidorm a los pasajeros que lleguen a Alicante en el AVE, Castedo afirma que el transporte urbano depende de manera exclusiva de su equipo de gobierno. Pastor, no obstante, trató de atajar ayer la disputa. "Existe un organismo que trata estos temas: la Dirección General de Transportes de la Generalitat. Alicante, Benidorm, Dénia, Calp o Torrevieja, entre otros municipios, tendrían que reunirse y exponer cada uno sus problemas", dijo.
La presidenta lamentó además que "nadie" se haya preocupado hasta ahora de los pasajeros que llegan en tren a la capital.
Fuente: Información (
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