viernes, 30 de junio de 2017
NOTICIAS --- El Gobierno Vasco exige que la conexión del TAV con Burgos incluya el tráfico de mercancías
El desbloqueo del proyecto para conectar la 'Y' vasca con el resto de la red de alta velocidad estatal era una noticia esperada en el Gobierno Vasco, pero el nuevo trazado diseñado por el Ministerio de Fomento no ha gustado nada a la consejería que lidera Arantxa Tapia. La intención del Ejecutivo de Vitoria es que la nueva red ferroviaria permita el transporte de viajeros a alta velocidad a lo largo de todo el corredor atlántico, pero también que la 'Y' vasca sea una infraestructura para el transporte de mercancías que permita trasvasar al tren los tráficos que ahora circulan por carretera. Y para ello, la 'Y' vasca debe enlazar en ancho UIC con las plataformas logísticas de Júndiz y Arasur, algo que Fomento no contempla.
En ese punto, y en las características técnicas de la vía (pendientes, curvas...) desde Burgos pensada solo para trenes de viajeros, es donde el Ejecutivo vasco ha encontrado el primer pero al trazado que el ministro Íñigo de la Serna presentó el lunes en Burgos, y el que le planteará en próximas fechas. Una línea de conexión con Vitoria completamente renovada, y con mucha más velocidad que la planeada hasta el momento. Pero que no está pensada para el transporte de mercancías y no garantiza la conexión con las plataformas de Júndiz ni de Arasur, en Vitoria. «Hay deficiencias fundamentales que son irrenunciables» para el Gobierno Vasco, advirtió como primera reacción el portavoz Josu Erkoreka, antes de que hoy la consejera de Desarrollo Económico e Infraestructuras profundice en el análisis del proyecto.
Pero el aviso es claro. El gabinete vasco va a exigir a Madrid la corrección de una ruta que acorta significativamente los tiempos de viaje previstos en los proyectos anteriores, y que permitiría conectar por ejemplo Madrid y San Sebastián en 2 horas y 40 minutos a partir de 2023, la misma fecha prevista para la inauguración de la 'Y' vasca. Pero que no convence a Euskadi al no garantizar el transporte de mercancías por ancho de vía europeo, una exigencia inamovible del departamento de Tapia, aunque afecte algo a la velocidad.
El tercer proyecto redactado por el Gobierno central sobre esta conexión esencial para dar continuidad al corredor ferroviario procedente de Europa empieza con mal pie. El trazado entre Burgos y Vitoria, con un coste previsto de 1.374 millones en lugar de los 1.536 previstos iniciales, llevaba años paralizado. Y se había convertido en uno de los puntos muertos de una red ferroviaria que en los años de la crisis avanzó a trompicones, y que ahora, el renovado equipo de Fomento parece dispuesto a darle un impulso definitivo tanto al tramo vasco, donde Adif está ultimando la nueva redacción del proyecto del nudo de Bergara; como en la conexión de la 'Y' vasca con Burgos; como en la unión entre el corredor atlántico y el mediterráneo a través de Navarra. Pero Euskadi, pese a aplaudir el desbloqueo del tramo que conectará Europa y Euskadi hacia el sur de España y Portugal, no aceptará un trazado que no contemple las mercancías, avisa.
Estudio informativo
El estudio informativo presentado el lunes tiene unas características técnicas en la ejecución del trazado que no convencen al Ejecutivo de Vitoria, ya que están planteadas para el tráfico exclusivo de trenes de pasajeros. Y además, Fomento no contempla llevar el ancho UIC hasta las plataformas logísticas, y se remite a la vía convencional. «Un parche», según el departamento de Tapia, que apuesta también por una red nueva en esos tramos de conexión.
Por lo demás, el trazado de Fomento plantea dudas sobre la mejor opción para que la vía salga de Burgos, pero tiene claro por dónde discurrirán los últimos 30 kilómetros hasta Vitoria. Atravesará los montes Obarenes y Ameyugo por Pancorbo con tres túneles de 6 kilómetros y 1,3 kilómetros de viaductos. Y salvará Miranda de Ebro mediante una variante para evitar que se reduzca la velocidad.
Fuente: El Diario Vasco