NOTICIAS --- El suelo del barrio del AVE logra comprador tras más de una década de subastas fallidas

La sociedad pública Zaragoza Alta Velocidad (ZAV) ha logrado finalmente un comprador para el suelo ferroviario de Delicias, en el que no se ha construido aún ni un edificio de viviendas pese a que la urbanización del barrio del AVE finalizó hace una década. Tras cosechar hasta cuatro subastas fallidas, a la última convocatoria para vender una parcela para 168 pisos se han presentado cuatro ofertas, lo que garantizará que al fin se vean grúas a la entrada de la ciudad por la avenida de Soria dentro de unos meses.

Salvo sorpresa, su desarrollo corresponderá a la riojana LMB (Luis Martínez Benito) y a la zaragozana Castillo Balduz, que han presentado la oferta económica más alta por esta manzana: si salió a subasta hace un mes por 10,4 millones de euros, ambas empresas están dispuestas a pagar 11,3. La siguiente, firmada por Neurbe Vivienda (de la familia Briceño), asciende a 11 millones, mientras que la de la cooperativa de viviendas Oroel se limita a 10,6 millones, 100.000 euros más que la de la madrileña Solojove.

La operación supondrá el revulsivo para la comercialización de las más de cien hectáreas que ocupaban antes las vías en Delicias y El Portillo, con capacidad para 3.901 viviendas. De hecho, la sociedad pública, controlada por el Gobierno (50%) y participada a partes iguales por la DGA y el Ayuntamiento, tiene previsto lanzar ahora al mercado más suelo para enjugar la abultada deuda, de 292 millones.

Eso sí, Zaragoza Alta Velocidad ha tenido que rebajar más de un tercio el precio de la parcela para conseguir que los inmobiliarios vuelvan a fijarse en el barrio del AVE. La repercusión por piso se ha recortado de los casi 100.000 euros de la última subasta, que se remonta a la primavera de 2016, a algo mes de 60.000 euros. En este cálculo no se tiene en cuenta el porcentaje de usos terciarios.

Un edificio de hasta 19 plantas

La parcela que se enajenará en cuanto lo apruebe el consejo de administración de ZAV tiene una edificabilidad de 20.704 metros cuadrados, de los cuales 18.204 se reservan a usos residenciales y los restantes a terciario (oficinas y comercial). Enclavada entre la las calles de Iriarte Reinoso y Fray José Casanova, podrá albergar un edificio de hasta 19 plantas, cuya fachada principal dará a la avenida de Soria.

Este solar se subastó sin éxito en 2007 y la cooperativa que anunció su adquisición dos años después acabó en los tribunales al quedarse con el dinero de los compradores de las viviendas. En esos momentos, el precio fijado por los terrenos ascendía a 49,1 millones y los gestores condenados pretendían levantar 156 pisos, una residencia de ancianos y un supermercado.

Cuando se firme el contrato de compraventa, se convertirá en la tercera parcela que logre enajenar Zaragoza Alta Velocidad. La primera fue la del antiguo cuartel de ferroviarios junto a la avenida de Navarra, con la que se reventó el mercado inmobiliario en Zaragoza en 2005 al pagar Luis Nozaleda 82 millones. Con la crisis, el suelo acabó en manos de Torrecerredo, una sociedad del grupo Ibercaja, que lo ha vendido a su vez Plaza 14 para levantar ahora la torre más alta de la ciudad, 106 metros, y que albergará 285 pisos.

En 2007 se vendieron otras dos parcelas. Una de ellas, situada junto al antiguo cuartel, a la constructora zaragozana Ebrosa, que aún no tiene fecha para desarrollar los 160 pisos a los que tiene derecho tras pagar 35,2 millones. Y la otra, a la bilbaína Jaureguizar para un edificio de oficinas junto a la rotonda de la Ciudadanía, pero solo pagó 3,8 millones antes de quebrar y ZAV se quedó con los terrenos.

Fuente: Heraldo de Aragón