martes, 30 de julio de 2019
NOTICIAS --- El calvario del metro de Madrid: 27 paradas con escaleras mecánicas averiadas a la vez
Estación de Manuel Becerra. Vestíbulo de distribución de andenes a las líneas 6 y 2. Seis de la tarde del 26 de julio, 31 grados. Dos turistas sevillanos emprenden su camino para volver a casa, maletas incluidas. Sudan la gota gorda para bajar a la fuerza 20 kilos y no perder el metro en el intento. Las escaleras mecánicas no funcionan y no hay ascensor. Tras ellos, baja una mujer mayor que, con resignación, se agarra a la barandilla y empieza a descender con mucho cuidado, escalón a escalón.
Sara Salsón tiene que hacer la misma yincana cuando lleva la maleta o las bolsas de la compra encima, pero un poco más allá de la M-30, en la estación de La Elipa. Se mudó al barrio en octubre y, desde entonces, ya ha visto varias veces a los técnicos arreglando las escaleras mecánicas, igual que el ascensor. “Es un desastre, las escaleras se estropean cada dos por tres. Y lo del ascensor ya es increíble: puede funcionar perfectamente por la mañana y romperse al día siguiente”, cuenta indignada. “Ahora mismo está otra vez fuera de servicio y yo creo que ya pasan de arreglarlo, porque lleva así un mes”.
Las inesperadas averías agotan a los viajeros, cuya paciencia ya empezó a rozar el límite a mediados de julio cuando se dio a conocer que Metro ha disminuido la frecuencia de sus trenes, empeorando los ya de por sí reducidos horarios de verano. A la espera en los andenes se suman las complicaciones provocadas por las averías técnicas, que hacen muy difícil desplazarse entre andenes y moverse con carritos o sillas de ruedas. No hay día en que alguien no se dirija a los perfiles oficiales en las redes sociales para desahogarse. “A veces pienso que los apagan solo para no dar servicio”, asegura una usuaria que se queja frecuentemente sobre la situación en Manuel Becerra. “Es infinito”.
Durante un mes y medio, desde el 3 de junio hasta el 18 de julio, El Confidencial ha recopilado cada media hora todas las incidencias mecánicas de escaleras y ascensores anunciadas en la web oficial de Metro entre las 7:00 y las 23:30 —la metodología está detallada al final del reportaje—. En estos 46 días, 204 estaciones han reportado al menos una incidencia en sus escaleras mecánicas y 150 en los ascensores (la red de metro tiene 301 estaciones, incluyendo aquellas que no disponen de escaleras mecánicas o ascensores). De media, 27 estaciones reportan una incidencia en sus escaleras mecánicas en un momento dado.
La estación de Estadio Metropolitano es una de las que más crecieron en número de viajeros el año pasado (de 300.000 entradas de usuarios en 2014 a 1,1 millones en 2018), como consecuencia del traslado de estadio del Atlético de Madrid. Y también es una de las que más problemas han presentado en sus infraestructuras de movilidad interna en el periodo analizado. De las 1.549 veces que se consultó el estado de las escaleras y los ascensores de cada estación, en el 98% de los casos aparecía un mensaje de 'escalera fuera de servicio' en Estadio Metropolitano, y un 86% para el caso de ascensores. Alameda de Osuna y Puerta del Sur, con un 96% y un 94%, son las otras dos que más han tenido problemas con sus escaleras mecánicas.
La estación de La Elipa, cerca de la casa de Sara, no es de las más transitadas (pasaron por ella 5,2 millones de personas en 2018), pero es la tercera con más problemas en sus ascensores (75%) en el periodo analizado, tras Estadio Metropolitano y Plaza de España, una de las estaciones más profundas de la red madrileña de metro.
Hasta 49 estaciones con averías el 24 de junio
Para ir a trabajar, Isabel Revilla tiene que viajar todos los días desde la parada de Cuatro Caminos hasta Conde de Casal. En total, son cuatro tramos de escaleras mecánicas que “todos los meses están estropeadas”. “Esta semana no funciona una de las escaleras, pero es que en abril nos tiramos con las mismas un mes. La siguiente parada es Nuevos Ministerios, así que te puedes imaginar cómo va la gente con las maletas”, se queja.
Esta estación no es de las peores —solo registró un 17% de incidencias—, pero sí una de las más antiguas: fue inaugurada por Alfonso XIII el 17 de octubre de 1919, el mismo día en que nació la estación de Sol. La edad de las terminales es un factor que influye de forma directa en la accesibilidad y la disponibilidad de las escaleras y los ascensores, tal y como explica Adrián Fernández, experto en movilidad. “Las estaciones más antiguas de Madrid se caracterizan por ser muy profundas, lo que implica un mayor despliegue y gasto para hacerlas accesibles. Para solo una estación tienen que instalarse seis escaleras y al menos tres ascensores”.
Según los datos oficiales, Metro de Madrid cuenta con 1.699 escaleras mecánicas y 563 ascensores, convirtiéndose en la red con más escaleras mecánicas del mundo, solo por detrás de Shanghái. En total, tiene más cintas transportadoras que Londres, París y Nueva York juntas, una cifra que augura una mayor probabilidad de averías al día, especialmente de pasamanos y electrónicas. “Muchas estaciones del centro (Iglesia, Sol, Manuel Becerra) ya están rondando los 40 años y las escaleras empiezan a necesitar un recambio que puede llevar varias semanas de demora en su uso”, apunta Adrián.
Lo cierto es que la ruptura de las cintas transportadoras no es nada nuevo en la vida de la ciudad. Ya en 2014, Metro decidió aumentar en un 22% el presupuesto de mantenimiento de las escaleras mecánicas invirtiendo durante los siguientes tres años 7,5 millones de euros en 592 cintas con el fin de mejorar su calidad y seguridad.
También endureció las condiciones de calidad exigidas a las empresas subcontratadas —Thyssen, Kone, Otis y Schindler— para el mantenimiento de escaleras y ascensores. Los nuevos acuerdos obligaban a que el 99% de las escaleras estuviera funcionando siempre, y además, en caso de avería, no podían pasar más de dos horas como máximo para la llegada de técnicos de reparación y tres horas y media para resolverlas. En caso de pasarse de tiempo, se les podría llegar a penalizar con la retirada de hasta un 15% de su facturación mensual.
Cuando se produce una avería en una escalera, esta se comunica al Commit (Centro de Operaciones de Mantenimiento y Monitorización de Instalaciones). Primero se intenta resolver el problema a distancia, monitorizando alarmas y datos en tiempo real. Si no funciona, se desplaza un equipo de técnicos de mantenimiento especializados “en el menor tiempo posible”, tal y como señalan fuentes de Metro. La compañía pública asegura que nueve de cada 10 escaleras y ocho de cada 10 ascensores se reparan en menos de 24 horas.
Sin embargo, los datos demuestran que una docena de estaciones —entre las que figuran Moncloa y Alonso Martínez, dos de las más transitadas— reportaron alguna incidencia en una de sus escaleras en más de la mitad de las veces que se realizó la consulta, y otras 10 en al menos una de cada tres durante el mes y medio que fueron analizadas. En estos 46 días, hubo algunos picos de incidencias. El 24 de junio a la una de la tarde fue el peor momento para las escaleras: 49 estaciones reportaron incidencias en alguna de sus escaleras en ese momento. A su vez, los ascensores tuvieron tres momentos problemáticos: el 11 de junio, el 28 de junio y el 2 de julio.
Revisiones continuas y millones en inversión
Los datos oficiales de Metro, disponibles en sus memorias, insisten en que hay muy pocas averías y que el 99% de las escaleras funciona a diario, un argumento que la dirección lleva repitiendo desde principios de año y que algunos sindicatos han puesto en duda. Según Metro de Madrid, las escaleras y los ascensores se revisan una vez al mes dentro de un plan de mantenimiento preventivo con el objetivo de garantizar su seguridad. Además, cada dos años los ascensores tienen que pasar la inspección reglamentaria correspondiente.
En 2017 se firmó un nuevo contrato de mantenimiento que incluía 529 escaleras mecánicas de la red, incluyendo un “seguimiento exhaustivo de la calidad de los trabajos de reparación”. Tal y como asegura Metro, durante ese año se continuó con la modernización de las escaleras en estaciones de alto tránsito, renovándose también las escaleras mecánicas de Diego de León y Chueca. No obstante, 2017 fue el año en que se invirtió menos en estos trabajos: 7,2 millones de euros frente a los 29 millones que se desembolsaron nueve años atrás.
La frecuencia de escaleras fuera de servicio varía dependiendo de la estación, la línea, su antigüedad y afluencia. En el siguiente gráfico puedes buscar las paradas que más te interesen para conocer la frecuencia de incidencias en las escaleras mecánicas durante el periodo analizado.
Fuente: El Confidencial