El deterioro de la propia vía y de las estaciones que deja a su paso ha ido, desde entonces, en aumento año tras año hasta llegar al punto de que muchas de las traviesas han sido expoliadas por gentes que buscan su negocio en maderas y raíles.
El 8 de diciembre de 1887 se inauguraba esta magnífica obra de ingeniería en la que trabajaron alrededor de ocho mil hombres y que hubo de sortear las dificultades del terreno, especialmente en los últimos 17 kilómetros, con 20 túneles y 13 viaductos metálicos.
Comenta el alcalde de La Fregeneda, Bernardo García, que «ya se nos van apagando los recuerdos». Imágenes de otras épocas en las que el tren aportaba trabajo y vida a una zona a la que cada vez se le suponen menos formas de desarrollo.
Puente en el que se aprecia el estado de la vía«Es una línea pensada para la realidad del siglo XIX», argumenta Bernardo García. «El cierre incluso pudo ser razonable, pero lo grave es que no se pensara en un plan de dinamización para paliar el impacto socioeconómico y que, a día de hoy, no se pueda explotar con otros fines», matiza el regidor. En términos similares se expresa el alcalde de Hinojosa de Duero, José Francisco Bautista que, igualmente, justifica el cierre pero lamenta que «hasta la fecha hayan fallado las propuestas para otros usos». Tanto las instituciones como los agentes sociales de la zona coinciden en la necesidad de rehabilitar esta vía férrea con fines turísticos.
Para José Francisco Bautista, «su utilización turística en el sentido más amplio de la palabra serviría como gancho para atraer a gente y buscar un futuro para nuestros pueblos que están tan despoblados».
Los contactos entre el Gobierno central, la Junta de Castilla y León y la Diputación de Salamanca no han servido, hasta la fecha, para sacar adelante un proyecto consensuado por el que todos apostaron.
Se planteó incluso, por parte de la Diputación dentro de su Plan de Dinamización de los Arribes crear una ruta de senderismo que transcurriera por el último tramo de vía, pero finalmente, la idea fue desechada. A juicio del alcalde de La Fregeneda, «ha sido un error perder esa posibilidad de caminar sobre esos 17 kilómetros, lo demás, quizás un tren turístico, vendría después».
Sólo "palabras".
El mismo Plan Regional Valle del Duero estudiará la recuperación de esta vía tanto para tráfico general, como el exclusivo para el turismo, así como su transformación alternativa en vías verdes, no para el transporte motorizado. Por último, el alcalde de Hinojosa de Duero ha mantenido un encuentro con el Secretario de Estado de Infraestructuras, Víctor Morlán, del que dice salieron buenas palabras, pero de momento, sólo palabras».
Su agenda recoge una próxima entrevista con Óscar López, secretario regional del PSOE, y con un empresario de la región, a los que hablará de esta vía. El extraordinario paisaje que forman las Arribes, a caballo entre España y Portugal, hacen de esta vía férrea un lugar único en el que destacan, especialmente, los últimos 17 kilómetros, una auténtica obra de ingeniería en la que hubo que salvar los escollos del terreno. Hay quien se atreve a realizan andando parte del trazado donde destacan, sobre manera, algunos de sus túneles entre los que se encuentran el conocido como 'La Carretera', con 1.593 metros de extensión, o el denominado 'Morgado', que tiene forma de U y del que se han hecho dueños una importante colonia de murciélagos. Otras de las particularidades de la zona son las aves que habitan el terreno y que lo convierten en un interesante lugar para el turismo ornitológico. Toda una oportunidad.
Fuente: Periódico Norte de Castilla (www.nortecastilla.es)