La compañía ferroviaria ha contactado con el profesorado del Campus Universitario turolense así como con el de institutos de Educación Secundaria y de Formación Profesional de Teruel, Calanda, Alcañiz, Monreal del Campo y de la vecina provincia de Cuenca, para llevar a cabo la selección de personal. Se buscan principalmente titulados en Ingeniería Informática y Telecomunicaciones o graduados en cualquiera de las titulaciones de FP de esta rama.
Fuentes de Renfe señalan que captar el capital humano de la provincia para contribuir a fijar población es uno de los objetivos de la puesta en marcha del CCD en Teruel, con el que, en la misma línea, también se quiere "descentralizar geográficamente las capacidades y recursos" de la empresa ferroviaria. Entre otras tareas, desde Teruel se dará soporte a la plataforma tecnológica del grupo Renfe, se administrarán servidores, sistemas operativos, bases de datos y aplicaciones y se diseñarán redes y comunicaciones.
El Centro de Competencias Digitales se ubicará en un local de casi 800 metros cuadrados situado en la Plaza de la Cultura, en una zona recientemente urbanizada conocida como Polígono Sur. Se trata de un emplazamiento provisional, pues el compromiso de Renfe es rehabilitar un antiguo taller ferroviario que se conserva en las inmediaciones de la estación de tren de Teruel y trasladar allí las instalaciones.
De este modo, además de crear empleo se recuperará patrimonio ferroviario, explican desde la compañía. De hecho, se decidió trasladar parte de los servicios centrales de la operadora a Teruel, entre otros motivos, por contar la ciudad con espacios adecuados al ser un enclave de especial relevancia ferroviaria.
El centro dispondrá de una sala destinada a la formación de los futuros trabajadores así como con diversas dependencias donde los empleados desarrollarán las actividades para las que ha sido diseñado este equipamiento. El CCD ocupará la planta baja de un edificio que anteriormente fue utilizada como gimnasio y que ahora ha sido distribuida a modo de despachos, oficinas y zonas comunes.
Se espera que su puesta en marcha genere "un entorno" que permita ayudar a traer a otras empresas tecnológicas a la provincia, incrementando así el empleo de calidad.
Fuente: Heraldo de Aragón
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