jueves, 12 de diciembre de 2019

NOTICIAS --- Renfe gasta 500.000 euros al año por los grafitos en trenes y estaciones


Una escultura importada de Arco preside estos días la estación intermodal de Delicias. La ha puesto Renfe para poner el acento en el daño que provocan cada año los actos vandálicos en trenes y estaciones de toda la red nacional. Y Aragón no es una excepción. Según los datos oficiales de la operadora ferroviaria «cada año se destina medio millón de euros a la limpieza de estas pintadas». Aparecen con regularidad y de forma sostenida en los últimos ejercicios, y, aunque la tendencia observada estaba siendo decreciente, lo ocurrido en lo que llevamos de mes de diciembre obliga a mantener la alerta. En solo nueve días se han presentado siete denuncias ante la Policía por pintadas como las que han ensuciado el mural que luce la zona de andenes de la estación de Goya, adornada con réplicas de obras conocidas del pintor de Fuendetodos.

Que haya siete en solo nueve días rompe una media que durante el año viene siendo de «seis denuncias cada mes» y tampoco es un buen dato. Sufrir este tipo de acciones con esta regularidad acaba traduciéndose de forma constante en más de 70 actos vandálicos al año en vagones y estaciones de toda la comunidad.

Desde Renfe, las fuentes oficiales consultadas por este diario explicaron que son las estaciones de «Casetas, Miraflores y Canfranc» las que más acciones de este tipo padecen cada ejercicio. Así, trenes como el canfranero es una víctima habitual de quienes no entienden que está tipificado como delito dañar el patrimonio público. O quienes lo saben e intentan sortear la ley.

Lo ocurrido en este 2019, aseguran desde la compañía, es el equivalente a haber pintado un mural de «más de 8.000 metros cuadrados de superficie», solo que en lugar de hacerlo en un lienzo utilizan vagones de trenes que al día siguiente prestan servicio a los aragoneses o estaciones que, como la de Goya, pueden utilizar miles de personas. Aunque el perfil de las terminales más damnificadas parace atender precisamente a todo lo contrario. Casetas y Miraflores son las estaciones menos utilizadas de la línea de Cercanías de Zaragoza, y a Canfranc llegan pocos usuarios cada día.

El AVE, intacto

Por contra, el AVE es actualmente inaccesible para los vándalos. Ninguno de los incidentes registrados está relacionado con la línea de alta velocidad, y no será porque en redes sociales no se alimente el reto de pintar uno de los trenes que habitualmente recorren la línea entre Madrid, Zaragoza, Barcelona y la frontera francesa. De momento, en la capital aragonesa al menos no ha sufrido ninguna pintada. Aunque desde Renfe hacen un llamamiento al civismo y a atajar este fenómeno que sí se ceba con convoyes de regionales o cercanías. Con especial relevancia tras el repunte de este mes de diciembre, al que todavía le quedan 21 días y ya ha superado la media mensual de todo el año 2019.

No en vano, a los usuarios les llama la atención que este tipo de actos se produzcan en estaciones que, aparentemente, tienen videovigilancia durante todo el día, por lo que entienden que debería ser relativamente sencillo dar con los responsables de estas pintadas en trenes y estaciones. Más aún en casos como la estación de Goya, vandalizada esta misma semana y con una afluencia de viajeros tan importante como tiene.

Fuente: El Periódico de Aragón