De esta manera, FGV invierte 42.296,69 euros, IVA incluido, en un proyecto que comprenderá la instalación en la estación de Benidorm de dos cámaras de videovigilancia nuevas (actualmente existen doce) y la colocación de tres cámaras térmicas que refuercen la seguridad, al poder detectar la posible intrusión de personas en la estación por las vías de ambos lados, al detectar movimientos en situaciones de escasa visibilidad, gracias a que todos los cuerpos emiten cierta cantidad de radiación infrarroja en relación con su temperatura.
Las Cámaras Térmicas o Cámaras de Infrarrojo de Barrido Frontal (FLIR, Forward Looking InfrarRed) convierte estas emisiones de los cuerpos, transformándolas en imágenes luminosas para ser visualizadas por el ojo humano. Estas cámaras facilitan la detección de cualquier cuerpo en condiciones normales y adversas, como: nocturnidad, ambiente con poca visibilidad (niebla), vegetación abundante, etcétera.
Además, se instalarán dos interfonos nuevos (actualmente existe uno), el primero al lado de las expendedoras y el segundo en el interior de la línea de validación, y se colocará una pantalla en el vestíbulo para mostrar información al viajero (horarios de salidas, advertencias, promociones, etcétera).
En el apeadero de Benidorm Intermodal se instalarán tres cámaras de videovigilancia y los equipos necesarios para la grabación de las mismas, así como la comunicación con el centro de vigilancia.
Todas estas mejoras conllevarán la ampliación de los equipos de comunicaciones debido a la instalación de los nuevos elementos.
Fuente: TRAM
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