martes, 4 de julio de 2017

NOTICIAS --- El servicio de Cercanías de Madrid sufre demoras casi diarias en varias líneas


Llegar con puntualidad por las mañanas al trabajo, la universidad o a una cita se han convertido en una tarea complicada si eres usuario de Cercanías Madrid. Prácticamente todos los días el servicio sufre pequeñas demoras de entre cinco y quince minutos en varias líneas, como han denunciado los viajeros y ha podido comprobar 20minutos. Los retrasos se acumulan sobre todo en las líneas C-2 (Guadalajara-Chamartín), C-3 (Aranjuez-Santa María de la Alameda), C-4 (Parla-Colmenar/Alcobendas) y C-7 (Alcalá de Henares-Fuente de la Mora).

"Sufro retrasos casi todos los días cuando vengo a Madrid y tengo que volver luego a Guadalajara", explica con cierta resignación María Jesús, de 45 años, en la estación de Atocha, donde está esperando la llegada de su tren: "La C-2 es de las peores líneas". "Hay días que nos hacen bajar en Coslada para cambiar de tren", concluye. A su lado, Inase, de 24 años, denuncia demoras en la C-4: "Siempre tengo retrasos. Vengo de San Sebastián de los Reyes y bajo a Madrid con frecuencia y suele tardar". "Muchas veces se saltan un tren y los retrasos son mayores", asegura Marco, de 43 años, que usa a diario la C-4 para acudir a su trabajo en la capital.

Solo el pasado mes de junio, la cuenta oficial de Twitter de Cercanías Madrid anunció más de una treintena de incidencias (sin contar causas ajenas como el vandalismo o la atención a algún viajero) que provocaron retrasos en las líneas C-2, C-4 y C-7.

Desde el colectivo especializado en transporte público Ecomovilidad señalan que más que hablar de líneas con retrasos habría que hacerlo de tramos conflictivos. "El problema es el cuello de botella que se genera en el itinerario entre Atocha y Chamartín. Allí confluyen muchas líneas y si hay una que sufre retrasos afecta a las demás. Esa acumulación afecta a toda la red. En el caso de Metro, por ejemplo, no existe ese problema porque las líneas son independientes", afirma un portavoz. "Esta situación perjudica a los itinerarios más demandados", añade. Los tramos más afectados son Alcalá de Henares- Atocha (C-2 y C-7) y Villaverde Bajo- Atocha (C-3 y C-4). "En este último tramos además se han reducido las vías de cuatro a dos (una por sentido) para que circulen las líneas de alta velocidad", precisan desde Ecomovilidad, que aclaran que "no son grandes demoras. Se trata de pequeños retrasos que, al ser recurrentes, cansan mucho al usuario", añade.

Desde Renfe niegan que los retrasos sean tan frecuentes, aunque reconocen las limitaciones de la infrestructura. Según datos facilitados por la compañía, la puntualidad del servicio de Cercanías en Madrid fue del 96,3% en 2016. Además, Renfe destaca que en su últimas encuesta el 82% de los viajeros de Cercanía han declarado estar satisfechos o muy satisfechos con el servicio, al que han dado una nota media de 7,5.

El problema ha llegado al Congreso

El problemas del servicio de Cercanías en la Comunidad de Madrid ya ha llegado al Congreso de los Diputados. El PSOE registró a finales de marzo una iniciativa reclamando al Gobierno mejoras en la red ferroviaria. En una proposición no de ley, los socialistas reclaman retomar las actuaciones contempladas inicialmente en el Plan de Infraestructuras Ferroviarias de Cercanías de la Comunidad de Madrid y actualizarlas "con las demandas surgidas desde su aprobación".

EN concreto, el PSOE reclama en su iniciativa "mejorar el servicio actual de Cercanías de Madrid, incrementando frecuencias y realizando un adecuado mantenimiento de trenes e infraestructuras", la ampliación del servicio en las líneas C-3 y C-2 y la construcción de una nueva estación. Concretamente en la línea C-4, en el polígono industrial de Cobo Calleja, ubicado en el municipio madrileño de Fuenlabrada. Precisamente, ambas demandas han sido aprobadas por unanimidad en la Asamblea de Madrid y en las Cortes de Castilla-La Mancha.

Fuente: 20 minutos