De momento, no se ha fijado una fecha de inicio de las obras, pero el plan es hacerlas coincidir con los meses de estío, porque es una época de menor demanda. Se sabe que esta vez no circularán trenes entre La Rambla y Hospital del Henares y que un autobús gratuito hará el recorrido de la 7B parando en las estaciones sin servicio.
La nueva suspensión en esta línea, también conocida como Metro Este, llega prácticamente un año después de la última incidencia. En febrero de 2020, la Comunidad cerró la estación de Hospital del Henares para intervenir en la estructura y solucionar algunas incidencias que se habían detectado. La clausura de esta parada, la última de la línea 7B, se prolongó cuatro meses, hasta junio de 2020, tras unas labores de reparación concienzudas y una inversión de 300.000 euros.
En aquella ocasión fue la vigilancia técnica continua del trazado –adoptada por las numerosas incidencias que viene dando desde su inauguración– la que aconsejó el cierre de la estación y el inicio inmediato de las obras, que se anunciaron casi de un día para otro. Esa labor de "monitorización" también ha recomendado ahora la nueva intervención programada. Porque si en algo insisten desde la Consejería de Transportes, Movilidad e Infraestructuras es en que a pesar de los problemas, Metro Este es un servicio "con todas las garantías de seguridad necesarias". De ahí que pueda seguir funcionando hasta que se fije el inicio de los trabajos. "Los problemas están detectados y hay un plan para irlos afrontando", aseveran estas fuentes.
El Gobierno regional aún no ha adjudicado el proyecto del próximo verano pero ya ha calculado cuánto dinero va a tener que destinar: alrededor de 1,6 millones de euros. Se sumarán a los más de 20 que ha tenido que gastar en los últimos años en este trazado. El grueso de la nueva inversión –en torno a 1,2 millones– se empleará en la reparación de la "superestructura".
En otras palabras, se busca acabar con las filtraciones de agua que son un auténtico quebradero de cabeza desde hace 14 años.
Entre otras actuaciones, está previsto impermeabilizar las zonas más afectadas por los cursos de agua e inyectar hormigón en la zona para asentar el terreno y tratar de atajar las filtraciones que también han terminado por afectar a decenas de viviendas de San Fernando que están edificadas en los alrededores del metro. Junto al Ayuntamiento de la localidad, la Consejería de Transportes también trabaja actualmente en la reparación de estas casas, algunas de las cuales están gravemente afectadas.
Pero la reparación de la estructura no será el único fin de las obras: también se aprovechará el parón para mejorar el servicio. En concreto, entre las paradas de San Fernando y La Rambla se pondrá un sistema que permitirá hacer maniobras con los convoyes cuando sea necesario.
Las obras que provocaran el cierre parcial de la línea 7B el próximo verano no serán las últimas en este trazado. Desde la Consejería de Transportes recuerdan que hay pendiente una reparación "en profundidad" de la estación Hospital del Henares. Se trata de la segunda fase de los trabajos que se desarrollaron en esta parada durante cuatro meses de 2020. De nuevo, el fin es asentar los terreno y aislar al máximo el suburbano de las filtraciones de agua. Para esta intervención aún no hay fecha.
Fuente: 20 minutos
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