Y es que, en este anhelo de Pamplona y Zaragoza por estar unidas por menos de una hora de viaje en AVE, la mitad que con el Alvia actual, el tramo aragonés estaba ligeramente más avanzado, ya que en el 2008 se encargó la redacción de los proyectos constructivos de los cinco subtramos en los que se divide el tramo Plasencia de Jalón-Tudela, unos trabajos que finalizarán, según el ministerio, "en pocos meses" y que permitirá "licitar las obras a finales de año para comenzar los trabajos en el primer trimestre del 2011".
El trazado de 78,4 kilómetros entre Zaragoza y Castejón, cuya ejecución le corresponde al Ministerio de Fomento en parte porque desde este tramo partirá también el trazado del Corredor Cantábrico-Mediterráneo hacia Logroño, Miranda de Ebro y Vitoria, costará unos 355 millones de euros. Pero esta cifra podría encarecerse y las obras podrían sufrir más retraso. Y es que no está todo resuelto. La razón: el subtramo entre Tudela y Castejón recibió alegaciones a su estudio informativo que se están intentando resolver con alternativas de trazado que podrían obligar al ministerio a tener que someterlas a una nueva declaración de impacto ambiental, un trámite que comprometería su ejecución. Además, debe definirse si en Tudela se construirá una nueva estación.
Aunque la confirmación aporta garantías de Fomento y tranquilidad, aparte de importantes novedades, sobre todo para Navarra. En la planificación de los trabajos, establece que la plataforma de la vía se deberá ejecutar entre el 2011 y el 2014 para que la señalización y electrificación de la infraestructura, así como las instalaciones complementarias, en sus 65,3 kilómetros de recorrido las realice Adif en el último año antes de su puesta en servicio. Tan claro dejaron las claves para garantizar su construcción en el 2015 como los importes a pagar por la comunidad foral (387,5 millones) y de Adif (287,5) en este tramo de 675 millones.
Fuente: El Periódico de Aragón (www.elperiodicodearagon.com)