NOTICIAS --- Adif se plantea adjudicar otra vez la obra del TAV entre Irun y Astigarraga para desbloquearla

Adif quiere desbloquear cuanto antes la paralización en las obras del TAV en Gaintxurizketa tras la entrada en proceso concursal de la empresa Coprosa, y para ello, se plantea resolver el contrato actual y volver a adjudicar los trabajos. «Es una opción», confirman fuentes de la gestora ferroviaria, que plantearán al administrador concursal, una vez analizado el avance de las obras hasta el momento, y decidida la mejor solución, o la menos gravosa. La «resolución» del contrato de adjudicación a Coprosa se erige efectivamente como la solución más factible, según diversas fuentes consultadas, para intentar que las obras se demoren el menor tiempo posible.

Además, según informaron ayer desde Adif, en el puente del Urumea, donde también trabaja Coprosa en la adaptación de la vía convencional a la circulación de trenes de alta velocidad, se está «barajando un contrato de emergencia para terminar la obra y garantizar así que la estructura no se deteriore».

La gestora ferroviaria estatal está decidida -así lo manifestó nada más conocerse el parón-, a buscar una solución lo más rápido posible para minimizar la incidencia en los trabajos de adaptación de la vía convencional al ancho UIC, el de alta velocidad, entre Irun y Astigarraga. Y esa solución pasa, casi con total seguridad, por resolver el contrato actual con Coprosa y volver a adjudicar lo que resta de obra. El contratiempo obligará a mantener paralizadas las obras durante un período aún no determinado, aunque las mismas fuentes confían en que la nueva tramitación se realice de la forma más ágil posible. Sea como fuere, parece improbable que se cumpla el plazo previsto inicialmente para que los trenes de alta velocidad procedentes de Francia llegaran hasta San Sebastián en los primeros meses de 2019. La fecha, si la tramitación se agiliza, podría retrasarse varios meses.

Tras la entrada del administrador concursal esta misma semana, responsables de Adif han viajado a Gipuzkoa en los últimos días para comprobar el estado de las obras y mantener reuniones con el fin de desbloquear cuanto antes los trabajos, que tenían como plazo de conclusión finales de año.

Incertidumbre laboral

Los problemas de financiación de la empresa asturiana adjudicataria -derivados del impago de dos obras en Catar y Egipto- llevaron a Coprosa a entrar en concurso de acreedores hace un mes. Adif era conocedora de la situación de la empresa, con la que mantiene otros vínculos contractuales en más obras ferroviarias, y desde entonces ha ido preparando la solución menos gravosa para la continuidad de la obra.

Los 37 trabajadores de la empresa adjudicataria destinados a este tramo del TAV permanecen desde hace más de quince días en casa, con licencia retribuida, y han iniciado movilizaciones para intentar conocer qué pasará con su situación laboral. Después de una concentración de protesta en la misma obra, el pasado lunes, a través del sindicato ELA que les representa, convocaron a una reunión en el Preco tanto a Adif como a Coprosa para pedirles información, pero ninguna de las dos empresas se personó.

Las obras del TAV en el tramo Astigarraga-Irun comenzaron hace un año. Además de modificar la catenaria o el ancho de vía, uno de los retos más complejos es la ampliación del gálibo de túneles como el de Gaintxurizketa, donde se trabaja desde septiembre, con una tuneladora única que permite mantener activo parte del servicio de trenes. La intención es que la tuneladora siga.

Fuente: El Diario Vasco