lunes, 6 de diciembre de 2010

NOTICIAS-Fomento elude el soterramiento ya comprometido de 10 km de vías.

La sombra de la crisis y el déficit es alargada y las obras del AVE se han quedado en los huesos. Que no es que sea poco, pero el listón de la propia coherencia del macroproyecto de la alta velocidad y de los compromisos firmes adquiridos con el territorio en su larguísima gestación era muy alto y exigía al Ministerio de Fomento más inversiones. El tsunami del tijeretazo en las infraestructuras metropolitanas, apenas detallado por el titular José Blanco, afecta de lleno a casi una decena de kilómetros de vías que debían soterrarse, la mayoría como obra complementaria del AVE. Son proyectos en los centros urbanos de L'Hospitalet, Sant Feliu y Montcada con muchos años de historia y con convenios firmados que obligan a su ejecución, pero que ahora o quedan en un limbo sin presupuesto ni plazos, o bien se retrasan otra vez sin más garantías.

Los ayuntamientos con todos los grupos municipales y las respectivas entidades ciudadanas se han unido de nuevo en las últimas semanas ante el silencio y el incierto futuro de unas obras largamente reivindicadas pero que se creían, aún dentro de su gran complejidad, a punto de iniciarse. Incluso los tres alcaldes socialistas no han dudado al final en hablar de posibles movilizaciones frente al gobierno amigo ante la evidencia de que no hay partidas en unos presupuestos del Estado del 2011 que salen justamente ahora del Senado camino otra vez del Congreso para su aprobación ya definitiva.

Trabajos en marcha.
Del total de 13,6 kilómetros de líneas a soterrar, Fomento solo está realizando ahora mismo los 4,2 de los sectores de la Sagrera y Sant Andreu por donde discurrirá la línea del AVE en Barcelona, con una inversión de 245 millones. A estos hay que añadir los 0,7 del corredor de Sants antes de llegar a la estación, que el ayuntamiento empezó el pasado mes de septiembre con un coste de 32 millones.

Un tren de Rodalies, en las vías que cruzan la Torrassa.

Frente a ello, Fomento tiene pendientes 9,4 kilómetros con un presupuesto global de 882 millones y el siguiente desglose. En L'Hospitalet son 4,3 kilómetros y 445 millones para un tramo de la línea R-2 de Vilanova y el aeropuerto que va desde la Granvia hasta la futura estación de intercambio de la Torrassa, cruzando Bellvitge. En Montcada la distancia a soterrar de las vías de Portbou y R-3 de Granollers-Vic es de 3,8 kilómetros con una inversión total estimada de 307 millones en el proyecto básico. En tercer lugar, en Sant Feliu de Llobregat, un proyecto no vinculado estrictamente al AVE, el tramo que dejará de dividir la ciudad mide 1,3 kilómetros y tiene un presupuesto de 130 millones.

En las obras de Montcada, que se detallan en la información contigua, Fomento ha dado algunos pasos que deberían situar en el 2012 el inicio de una de las cinco fases en las que se ha subdividido ahora el proyecto. La alcaldesa Maria Elena Pérez viajó a Madrid y después el secretario de Estado de Infraestructuras, Víctor Morlan, vino a Barcelona para «ratificar el acuerdo del 2007» origen del compromiso que por ahora no se cumple.

Sin noticias.

En los otros dos casos no hay ninguna concreción, aunque fuera una reconsideración de plazos o fases. En el pleno de L'Hospitalet del 23 de noviembre todos los grupos reclamaron la obra a Blanco. La alcaldesa Núria Marín dijo que le ha pedido una entrevista «urgente»y añadió que si la respuesta no es satisfactoria, «se abre la vía traumática».

En Sant Feliu, el pleno ha reclamado esta semana y por unanimidad que empiecen unas obras en cuya pago participa también el ayuntamiento y la Generalitat. El alcalde Juan Antonio Vázquez, que no se presentará a la reelección, habló igualmente de «acciones reivindicativas en la calle».

Fuente: El Periódico de Catalunya (www.elperiodico.com)