Más amplios, con espacio reservado para minusválidos y bicicletas, con el suelo de color rojo intenso, a prueba de desgaste, y pintura exterior antigraffiti. Así serán los 302 nuevos coches -60 trenes- que renovarán la flota de Metro a partir de mayo.
La principal novedad de los nuevos trenes es la rampa instalada, en el primer convoy, que se desplegará automáticamente en cada estación para facilitar el acceso a personas de movilidad reducida. Además, un interfono en el reservado para minusválidos conectará el vagón con el conductor ante cualquier incidencia.
El consejero de Transportes, José Ignacio Echeverría, visitó ayer la fábrica CAF, en Zaragoza, donde están en proceso de montaje la mayoría de estos trenes, que han costado 400 millones de euros. La línea seis, la que más problemas arrastraba por su antigüedad y carga de viajeros, será la más beneficiada con 108 coches. Los 122 coches restantes irán a parar a las líneas 2, 3, 8, 10 y 11.
"La línea seis a mí ya no me molesta", se congratuló el consejero. "Ya no me llaman por todos los fallos técnicos que traían locos a mis compañeros". Y no es para menos, porque la Consejería ha invertido en la modernización de esta línea, con 120 millones de viajeros anuales, un presupuesto de 600 millones de euros.
Viajar con la bicicleta parece que también será más sencillo en los nuevos coches destinados a la línea circular, donde habrá un reservado con capacidad para dos bicis.
Los próximos retos de Metro ahora serán otros. "El resto de líneas tienen un grado de perfección importante", afirmó el consejero de Metro, Ignacio González Velayas, que también visitó la fábrica. "Lo que queda de legislatura y la siguiente nos centraremos en remodelar las estaciones más antiguas de la red".
Fuente: El País (www.elpais.es)