sábado, 28 de abril de 2012

NOTICIAS-Feve garantiza el proyecto de integración tras el anuncio de su absorción por parte de Renfe.

El Gobierno de España ha decidido que la empresa pública Ferrocarriles de Vía Estrecha (Feve) se integre en Renfe dentro de su plan de reformas para recortar el gasto de las empresas públicas y mejorar su eficiencia.

El acuerdo ya es firme y estaba previsto que recibiera el visto bueno durante la reunión del Consejo de Ministros de ayer, algo que finalmente no ocurrió. Sin embargo, este anuncio provocó ayer que el presidente de la compañía, Marcelino Oreja, anulase su visita a la localidad de San Feliz de Torío con el objetivo de presentar la temporada del tren turístico Transcantábrico. De hecho, acababa de llegar a León cuando se enteró de que el anunció se había hecho público y tuvo que regresar a Madrid.

Fuentes de la empresa ferroviaria confirmaron ayer a este periódico el proceso para su absorción por parte de Renfe y explicaron que no afectará en ningún caso a ninguna de las obras actualmente en marcha, entre las que destacan las de la integración de la vía estrecha en el casco urbano de la ciudad de León. Los cambios se centrarán fundamentalmente en cuestiones organizativas con el objetivo de mejorar la eficiencia de gestión de ambas compañías, según apuntan las mismas fuentes.

La llegada de Oreja a la presidencia de Feve supuso un vuelco en el proyecto de integración, que mantiene su plazo de conclusión para la primera mitad de 2013, según el calendario oficial, aunque la compañía trata de aligerar los plazos para que el ‘tren-tram’ circule durante el primer trimestre. Ese vuelco supone una rebaja cercana al 30% sobre la inversión prevista inicialmente. Concretamente, la cifra pasará de 71 millones de euros a sólo 45.

La rebaja mantiene el núcleo del proyecto, que supone elevar la cota de la vía para suturar la brecha que separaba el barrio de San Mamés y la Universidad de Mariano Andrés y la zona de la Asunción. El ajuste se basa por tanto en el aplazamiento del ramal que se había previsto hasta el hospital desde la calle Peligros, cuya ejecución estará supeditada a un estudio de viabilidad que se dará a conocer en los meses de septiembre y octubre.

Esto deriva además en que León no recibirá los cuatro tranvías que había encargado Feve para cubrir este trayecto y en que no se electrificará la plataforma que se está desarrollando entre la estación de Padre Isla y el apeadero del barrio de la Asunción. Los doce maquinistas formados para conducirlos seguirán en las bolsas de trabajo y recibirán una parte del valor del curso como compensación.

Es preciso recordar que se habían encargado también cuatro trenes-tranvía que se utilizarían para la línea regular de Feve y que podrían circular tanto por la plataforma habitual como por la tranviaria que ya se ejecuta en el acceso a la capital. Además, los trenes-tranvía pueden funcionar con combustible, por lo que se descarta la electrificación, un sistema muy costoso y con impacto visual que no sería eficiente para su aplicación en un tramo de sólo dos kilómetros.

El núcleo del proyecto supone la reurbanización del entorno de la estación, donde se prevén nuevos viales y 150 viviendas, del parque ubicado en San Mamés y de la plaza de Juan de Austria, que ya tiene abiertos al tráfico sus nuevos carriles.

En el mes de julio se acometerá la reforma del puente de los Maristas, punto a partir del cual comienza a elevarse la cota de la vía, que quedará a la altura de las calles adyacentes a la altura del citado parque de San Mamés.

Fuente: La Crónica de León (www.lacronicadeleon.es)