El tranvía cubriría la demanda de los sevillanos que no tengan cerca de su casa una parada del Metro. Esta propuesta, diseñada por un grupo de investigación de la Universidad de Sevilla, y de la que ya tiene conocimiento el alcalde, Alfredo Sánchez Monteseirín, plantea una red de tranvías que recoge, como medida estrella, la ampliación del Metrocentro a la Alameda desde el paseo de Torneo. Eso desecharía la opción, que tanto debate ha generado, de que el tranvía se adentrara en el Centro hasta llegar a la Encarnación o La Campana y, a partir de allí, conectar con la Alameda.
La red estaría compuesta por cuatro líneas de tranvía que tendrían "un recorrido complementario al de las líneas del Metro", como apunta Juan Ramón Canto, miembro del grupo de Geografía Física Aplicada y Patrimonio de la Universidad de Sevilla. La primera propone la ampliación del Metrocentro pero sorteando la estrechez de las calles del Centro.
Su recorrido empezaría por la calle Almirante Lobo, conectando con el actual trazado en la calle San Fernando. Seguidamente, se aprovecharía la amplitud de las vías paralelas al río Guadalquivir, como el Paseo Colón o el paseo de Torneo, con una parada intermedia en Plaza de Armas para enlazar con la estación de autobuses y la futura línea 2 del Metro. También hay un tramo que iría por Marqués de Paradas.
El camino propuesto seguiría hasta el puente de la Barqueta y, desde allí, se adentraría en la Alameda por la calle Lumbreras. Ahí entraña la principal dificultad del recorrido, dada la estrechez de la vía, que obligaría a que sólo hubiera un carril para los dos sentidos. Pese a ello, la idea cuenta con la ventaja de la inexistencia de líneas -ni siquiera de autobús- que cubran este trayecto, que no sólo pararía en Plaza de Armas, sino también en la Torre del Oro, la futura biblioteca de Torneo y la comisaría de Policía Nacional.
La Universidad de Sevilla solventaría así los problemas que el Ayuntamiento tiene para abordar una ampliación con el escollo de la estrechez de las calles del Centro, de difícil paso para los vagones incluso con la previsión de que entre en funcionamiento el nuevo modelo de tranvía, que son más estrechos y no requieren de las catenarias. Claro ejemplo es el cambio de parecer del Consistorio, que pasó de aspirar a extender la línea del Prado de San Sebastián -y San Bernardo- a la estación de Santa Justa a preferir un nuevo trayecto que partiera de la estación de trenes hasta la plaza de la Encarnación.
En todo caso, el Ayuntamiento todavía no se ha decantado por ninguna propuesta en firme y aún alberga alguna esperanza de que el tranvía se adentre en el Centro histórico, aunque coincida con el Metro, que ya tiene previsto en el trazado de la línea 3 una sola parada en la Encarnación.
Frente a esta idea, Canto recalca que la nueva línea del tranvía, unida a la red de Metro prevista por la Consejería de Obras Públicas y Vivienda, permitiría que "todos los vecinos de la zona Centro vivan a menos de 500 metros de una parada", o lo que es lo mismo, a siete minutos a pie. "No es una quimera sino una solución que pasa por conjugar el tranvía con el suburbano", remarca el investigador.
La red de tranvías, que cuenta con otras tres líneas más para atender a los barrios periféricos, ha calado de tal manera que ya ha llegado a manos de los responsables de la redacción del Plan Estratégico Sevilla 2020, que están dispuestos a elevar esa propuesta a la Comisión Ejecutiva, órgano clave para la redacción de un documento que tiene como principal cometido diseñar el futuro de la ciudad durante la próxima década. Además, postula con los retos marcados por el citado plan, que reivindica en su borrador (Documento dos), la implantación extendida de los tranvías como un nuevo modo de desplazamiento en la ciudad, con conexiones con Metro y Cercanías.
El director del Plan Estratégico Sevilla 2020, Enrique Hernández, reconoce que el planteamiento de partida del Consistorio es que "el tranvía no se quede en una línea, sino que se desarrolle una red". En ese panorama, la propuesta lanzada desde la Universidad de Sevilla "ayuda a tener un mapa concreto y, en cuanto esté dentro del plan, ya sería un proyecto asumido por la ciudad". En ese sentido, cita como ejemplo la línea 1 del Metro de Sevilla, que se había incluido con un boceto de trazado en el Plan Estratégico Sevilla 2010 y finalmente se ha inaugurado dentro de los 10 años de vigencia del documento.
Hernández concede mas valor si cabe a la propuesta por tratarse de "un planteamiento de mejora de la movilidad en la ciudad que, sin duda, será el tema estrella del Plan Estratégico y el que más se ha abordado en las mesas ciudadanas". Tanto es así que están trabajando con la Universidad de Sevilla en buscar otras soluciones, como el diseño de un nuevo modelo de barrio ciudad o alternativas para los problemas derivados de la carga y descarga en el Centro.
Fuente: El Correo de Andalucia (www.elcorreoweb.es)