NOTICIAS-El desbloqueo de Sagrera permitirá iniciar las obras este mismo año.

Tras 15 años de denodado esfuerzo por los que han desfilado cinco ministros del ramo, tres presidents y tres alcaldes de la ciudad, Barcelona ya tiene garantizada la financiación necesaria para llevar a cabo la estación de la Sagrera. Una infraestructura que es algo más que una estación y sobre la que pivota la última gran obra de transformación en la capital. Las cifras son astronómicas: la estación tiene un coste de 703 millones de euros, de los que 161 corren por parte de Fomento, vía presupuestos del Adif. Otros 255 los aportará el Gobierno con cargo a la disposición adicional tercera del Estatut y, el resto, 287 millones, deberá sufragarse con la plusvalías que se obtengan de la venta de los terrenos aledaños a la estación. La intención del Gobierno es ir encadenando trámites sin solución de continuidad para licitar las obras en verano e iniciar obras en este mismo 2009. Precisamente las demoras, los lapsos de tiempo entre la aprobación del proyecto y la licitación y entre esta y la adjudicación --por falta de dinero para hacerlo-- era el principal temor que tenía el alcalde Hereu.

Estado de las obras de AVE en los terrenos de la futura estación de la Sagrera.

La referencia a la disposición adicional tercera levantó ayer duras críticas de los grupos municipales de CiU, PP y ERC, por entender que debería ser el Adif quien sufragará por entero los trabajos. Las tres fuerzas entienden que esos 255 millones --a pagar en cinco anualidades de 51 millones-- van en detrimento de otras obras que se deberían realizar en Catalunya. El conseller de Política Territorial i Obres Públiques, Joaquim Nadal, que se desplazó a Madrid como Hereu para rubricar el acuerdo con el ministro de Fomento, José Blanco, negó la mayor. Nadal recordó que toda inversión del Estado en infrastructuras forma parte de la adicional tercera, que prevé que el dinero que aporte al estado en esta materia en Catalunya equivalga al peso de esta comunidad en el PIB español, es decir, el 18,5%. No existe, por tanto, una bolsa en forma de inversión ordinaria y, después, un plus que derive del mandato estatutario.
En cuanto finalicen los trámites relacionados con el proyecto, el Gobierno licitará, este verano, por valor de 638 millones de euros, una de las mayores en la historia reciente del ministerio. El líquido del que se dispone ahora, lo que aporta Adif y lo que aporta Fomento (416 millones), dan para sufragar, íntegramente la primera fase de las obras. Además, junto con esta primera fase, el Adif licitará los accesos ferroviarios a la estación, por 211 millones, para totalizar esos 638.

Accesos ferroviarios.

Estos accesos ferroviarios consisten en la plataforma de la línea de alta velocidad entre Bac de Roda --final del túnel Sants -Sagrera-- y la propia estructura de la nueva estación e incluye la cobertura de las líneas de cercanías y el viario urbano asociado a la obra.
Cuando las obras de la primera fase --de infraestructura: la caja, en definitiva-- se acerquen a su fin será el momento de acudir al mercado para obtener los 287 millones que costará la arquitectura interior de la estación. ¿Y si las plusvalías no dan para esos 287 millones? Puestos en ese escenario --"pesimista", según Blanco-- "se articularían mecanismos para que la obra no se detenga ni un solo día". Palabra, pues, de ministro que tampoco bastó a la oposición municipal, que describió la situación como que la financiación de esa segunda fase quedaba "colgada".

Una de las opciones que ya apuntó a principios de semana el conseller de Economia, Antoni Castells, es que el consorcio formado por las tres administraciones para la gestión de los terrenos aledaños a Sagrera acudiera a los bancos para obtener financiación. Si la previsión a largo plazo es de obtener mejores plusvalías y los créditos se solicitan ahora, que el tipo de interés anda por los suelos, podría ser una operación económicamente muy rentable, según fuentes del Govern.

La Sagrera contará con 10 vías de alta velocidad y otras ocho de Cercanías. La cubierta de la estación --futura plaza de la zona de oficinas que se construirá sobre la caja -- actuará como un gran lucernario por donde se iluminará de manera natural la instalación, avanzó Blanco.

Fuente: El Periódico de Catalunya (www.elperiodico.com)