NOTICIAS --- Fomento dejará de invertir este año más de 65 millones en las vías de Teruel y Canfranc

El Ministerio de Fomento ha vuelto a postergar otro año la inversión millonaria comprometida para renovar las líneas ferroviarias de Teruel y Canfranc, dos de las actuaciones más reclamadas por las instituciones aragonesas. El retraso en la licitación de los proyectos provocará que se pierdan más de 65 millones presupuestados para modernizar el ferrocarril aragonés a lo largo de este ejercicio. A estas alturas, no se han licitado aún las obras, incumpliendo así los reiterados anuncios y calendarios del Gobierno central.

La sociedad pública que debía encargarse de impulsar las obras, el Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (ADIF), apenas ha ejecutado en el primer semestre 1 de los 68 millones presupuestados este año para acometer la modernización de las líneas ferroviarias de Aragón. Y los datos no variarán mucho en lo que resta de ejercicio, puesto que los trabajos comprometidos en Teruel aún deben salir a concurso y los de Canfranc no tendrán siquiera un proyecto antes de fin de año.

Los datos oficiales de la Intervención General del Estado no dejan lugar a la duda del agravio comparativo al que somete el grupo Fomento a Aragón con sus decimonónicas líneas ferroviarias. De hecho, el ADIF ha batido el récord al relegar las actuaciones planificadas y situar a la Comunidad como el territorio con la más baja ejecución presupuestaria en lo que va de año.

El porcentaje de dinero invertido se limita a un exiguo 1,5% pese a que el propio ADIF se comprometió públicamente con los gobiernos de Aragón y de Valencia a licitar en enero un paquete de obras de renovación de la línea ferroviaria entre Teruel y Sagunto y en puntos de la vía entre Zaragoza y Teruel por un importe de 47,1 millones.

Esta actuación pretende adecuar el corredor al tráfico de mercancías, para lo que se plantea sustituir 106.000 traviesas y 40 kilómetros de raíles, adecuar terraplenes, mejorar drenajes, renovar obras de fábrica antiguas y estructuras antiguas, losas de carril y puentes tipo arco, entre otras actuaciones.

Sin embargo, el ADIF se esperó hasta el pasado viernes, solo dos días antes de la gran movilización de Valencia en defensa de un ferrocarril de altas prestaciones, para emitir un comunicado en el que apuntaba que los citados trabajos, ahora valorados en 38 millones, saldrán a concurso antes de fin de año.

De hecho, en lo que va de año solo ha invertido 742.850 euros en las obras de adecuación de once estructuras para acabar con la limitación de carga de los trenes de mercancías, que se levantó el pasado 1 de octubre.

Su gestión se ha limitado a sacar a concurso en verano la construcción de cuatro de los siete apartaderos previstos para que se puedan cruzar los trenes a lo largo de la línea. El importe asciende a 7,2 millones, aunque este año ya no dará tiempo a ejecutar las obras porque ni siquiera se ha adjudicado y aún habrá que firmar después el acta de replanteo.

Igualmente, ha licitado el estudio de impacto ambiental de las instalaciones eléctricas necesarias para alimentar la futura catenaria en el tramo entre Teruel y Sagunto y la redacción del proyecto de electrificación de la línea completa, de Zaragoza a Sagunto.

Lejos de asumir la demora, el ADIF destacó en dicho comunicado que ha "impulsado" nuevos contratos por valor de 61 millones de euros "para la mejora de la infraestructura". Además, insistió en que suponen "un nuevo paso en el avance del cumplimiento de los compromisos anunciados por el Ministerio de Fomento para la configuración de esta línea como eje estratégico del Corredor Cantábrico-Mediterráneo".

Peor suerte corre el ferrocarril Huesca-Canfranc, cuya renovación se retrasa año tras año. El presupuesto inicial para 2018 se limitó a 859.000 euros pese a haber comprometido 20 millones en la partida plurianual, aunque el PAR logró sacar adelante una enmienda el pasado verano para que se incluyera finalmente este dinero.

El problema es que no servirá de nada, puesto que la sociedad pública únicamente ha adjudicado la redacción de los proyectos de mejora integral de la línea por 1,2 millones. Esto es imprescindible para luego licitar las obras, que están valoradas en 75 millones y que, a esas alturas, no tienen fecha de ejecución.

Fuente: Heraldo de Aragón