martes, 8 de octubre de 2019

NOTICIAS --- 89 proyectos sufren los primeros recortes de PP-Cs


El Gobierno de PP y Cs ha conseguido el apoyo necesario de Vox para llevar a cabo, si no el «mayor recorte de la historia del ayuntamiento» como defiende el PSOE, sí el primero de su mandato, de la mano de unas modificaciones de crédito que han alcanzado hasta 89 proyectos de inversión en los distritos, algunos de calado como la prolongación de Tenor Fleta o la reforma de la avenida Cataluña, o de mejora sustancial de los servicios. El listado es tan largo que detenerse solo en un detalle de las partidas que se han quedado a cero o con una cuantía insuficiente para empezar a trabajar en su ejecución resulta complicado. Pero merece la pena intentar aproximarse a los que hoy son los damnificados de esa primera tijera presupuestaria.

Bajo el paraguas del agujero de 103 millones de euros que hay que atender entre infradotaciones y sentencias condenatorias, que ha desvelado la auditoría encargada por el alcalde Jorge Azcón, se han incluido, fundamentalmente proyectos que llevan el sello de la izquierda. Y llama la atención que se cuelen algunos que, desde la oposición, su socio del Gobierno, Ciudadanos (Cs) introdujo en las cuentas del 2018 ahora prorrogadas pese a que luego nunca las votó a favor.

Partida a partida 

Es el caso de la actuación en los Viveros Sopesens, una mejora en las orillas del Huerva que tenían 200.000 euros pero que ahora están dispuestos a ejecutarlo por 86.148,69 euros menos, que es lo que le han recortado a su partida sin que todavía se haya licitado. Y qué decir de las escuelas infantiles de Parque Venecia y Valdespartera, que con 100.000 euros no se iban a levantar pero sin ellos tampoco podrán salir a concurso público este año. O el Ágora del ansiado centro cívico de Rosales del Canal, que antes tenía 10.000 euros y ahora nada.

Forman parte de un largo listado de proyectos que alcanzaban a todos los barrios en esa modificación de créditos aprobada el mes pasado. Y, entre ellos, tres puntales básicos en el anterior mandato. El más voluminoso es el de los presupuestos participativos, obras propuestas y votadas por los vecinos –pocos, pero democráticamente–, que se quedan de golpe sin 1,9 millones de euros para este año, de los 4,85 con los que empezó el 2019 y con previsión de recuperar, el año próximo, 1,64 de ellos.

Histórica

El más simbólico, el de la avenida Cataluña. Este era su año. Después de varios tramos ejecutados, parecía que definitivamente se iba a impulsar una reforma integral que llevan dos décadas esperando los vecinos. El vial ya está cedido por parte del Ministerio de Fomento, aunque la cuantía fuera criticada por partidos como el PP y el PSOE en su día por no haber peleado algo más de esos 1,4 millones que Madrid pagará a Zaragoza en forma de asfalto, costeando el pavimento. Y el ejercicio se iniciaba para ellos con 400.000 euros de partida que era más que suficiente para licitar. Desde el mes pasado, esta se ha quedado en 25.000, que no da ni para pintar el carril bici. El más inesperado es el de la prolongación de Tenor Fleta. Los vecinos de San José, a día de hoy, no deben estar entendiendo nada de lo que está sucediendo. El propietario del cajón de vías, Adif, ya ha cedido el uso de la superficie, después de que una noche antes del verano se llenara de camiones de gran tonelaje para hacer las pruebas de carga. Resultado perfecto, luz verde a una licitación que, meses después, sigue sin llegar. Y ahora se queda de golpe sin los 1,6 millones que tenía en dos partidas diferentes. Cambia la consignación y también el plurianual, que hace que la finalización de esta importante obra para Zaragoza ahora se fije para el 2021, no el 2020. Aunque el Gobierno PP-Cs se ha apresurado a garantizar que el año próximo estará en las cuentas, licitada y en ejecución, los últimos 449.500 euros estarán en el siguiente ejercicio. Para el 2019 se queda con 1.000 euros y para el 2020, 1.227.305,53. 

Menos llamativo resulta que entre los sacrificios estén proyectos como las azoteas verdes (29.500 euros había) o las supermanzanas (360.000) que pretendía CHA. O que la segunda fase del nuevo Centro de Protección Animal (CPA) construido por ZeC en Empresarium se queda sin dinero para seguir avanzando. Al igual que el Plan de Infraestructura Verde aprobado por el Gobierno anterior, o las reformas de los centros municipales de Servicios Sociales, que necesitan reformas y disponían de 337.610 euros.

Pero sorprende que no le haya templado el pulso para que uno de los proyectos más demandados en años anteriores, como la rehabilitación y mejoras en los llamados grupos de viviendas sindicales, se queden sin los 600.000 euros que tenían consignados. O los 100.000 euros que tanto costó arañar para redactar un proyecto que dé vida a la explanada de la Estación del Norte, en el Arrabal, o para el centro de infancia y juventud del Picarral (100.000 tenía). La misma cantidad que había para la adecuación de la parte de los antiguos juzgados de la plaza del Pilar que la DGA sigue sin ceder. 

¿Recortes necesarios o ideológicos? ¿Declaración de intenciones o anticipos a cuenta al bloque de la derecha en el consistorio? Lo cierto es que sorprende que un día el alcalde Azcón salga en las fotos subido en un patinete eléctrico en la feria de la movilidad y días después se aplique un recorte de 500.000 euros a proyectos dedicados a esa misma movilidad, para instalar esos cargadores que tanto hacen falta para que las ventas por fin despeguen.

Fuente: El Periódico de Aragón