miércoles, 17 de mayo de 2017

NOTICIAS --- La intermodal de Lezo moverá 4 millones de toneladas de mercancías al año


La plataforma logística de Lezo sale de su letargo. Como otras infraestructuras guipuzcoanas de larga digestión, este proyecto Guadiana resurge de la mano del acuerdo presupuestario recientemente firmado entre el PP y el PNV. Los jeltzales han logrado que los populares se comprometan a invertir 600.000 euros entre 2017 y 2018 para la redacción del proyecto de la intermodal, como paso previo al posterior desarrollo constructivo. Se trata de una cantidad modesta, pero tiene la virtud de poner el proyecto otra vez sobre la mesa.

La infraestructura cuenta a priori con todos los 'placet' para salir adelante. El Gobierno Vasco y el Ministerio de Fomento firmaron en mayo de 2011 un protocolo para realizar los estudios de viabilidad y de encaje territorial. El Gobierno central incluye este proyecto dentro del Plan Estratégico para el Impulso del Transporte Ferroviario de Mercancías del Estado. Además, y esto es relevante, forma parte de las actuaciones prioritarias a desarrollar en el corredor Atlántico de la red europea de transportes. Por tanto, dispone de los parabienes de la Unión Europea, que ofrece una cofinanciación de hasta el 40% para las infraestructuras terminadas antes de 2030.

Si el proyecto cuenta con todos estos ases en la manga, ¿por qué no se ha puesto ya en marcha? En su letargo se han unido el hambre y las ganas de comer. Es decir, el Gobierno central no tenía dinero y en Euskadi las diferencias institucionales pusieron en bandeja al ministerio el aplazamiento del proyecto. En el tablero local se enfrentó el deseo del Gobierno Vasco por impulsar la plataforma con las trabas de la Diputación, gobernada por Bildu, que se oponía a que los terrenos se destinaran a esa iniciativa.

Ahora, finalmente, parece que los astros se alinean en la posición idónea. Los tres gobiernos -español, vasco y foral- impulsan el plan y además el presupuesto estatal acoge una partida inicial para que se den los primeros pasos efectivos. Queda por delante una larga y compleja tramitación, pero el acuerdo político es sólido y si no surgen contratiempos parece que esta será la definitiva.

La plataforma logística permitirá a Gipuzkoa rentabilizar su privilegiada situación como acceso de la Península y norte de África a Europa. Es decir, se convertirá en una pieza esencial del corredor de mercancías del eje Atlántico. En la actualidad, el territorio ya ejerce esta función, pero de una manera deslavazada: el puerto por un lado, el ferrocarril por otro y las carreteras por el suyo. La intermodal conectará estas tres redes con el fin de facilitar el intercambio de mercancías entre ellas. El potencial, por tanto, se avizora inmenso, porque además tendrá un efecto llamada sobre empresas del sector.

80.000 contenedores

El Gobierno Vasco dispone de un proyecto, todavía en fase muy inicial, en el que fija las infraestructuras con las que debería contar la intermodal para dar servicio a un tráfico previsto de hasta 4,2 millones de toneladas de mercancías, de las que el 10% serían contenedores, evolucionando desde los 35.000 iniciales hasta 80.000. Un volumen de movimiento de mercancías muy considerable, superior al del puerto de Pasaia, que el año pasado registró 3,4 millones. El presupuesto de la intermodal ascendería a 128 millones de euros (IVA no incluido).

La actuación fija dos objetivos básicos, crear una terminal ferroviaria (que se desarrollaría en dos fases) y establecer una zona auxiliar para el puerto de Pasaia. Además, permitirá liberar parte de la playa de vías de Irun, de forma que se pueda ejecutar el ambicioso plan urbanístico previsto en la localidad.

La plataforma logística se extenderá sobre una superficie de 55 hectáreas, de las que 11,5 se destinarán a la citada terminal ferroviaria. Estará enclavada en el entorno de Gaintxurizketa, paralela a las vías de Adif y de Euskotren, y de la antigua N-I, a la altura de Hornos Salva. Tendrá capacidad para doce nuevas vías con una longitud igual o superior a 750 metros. Allí confluirán la red de ancho ibérico (el existente en la Península), el UIC (el que llega hasta la frontera, desde el lado francés) y el métrico (Eusko Tren). Esta zona contará con las instalaciones necesarias para el intercambio de mercancías tren-camión y tren-tren. Además, se habilitará una conexión directa con el puerto, de manera que se multiplicará la versatilidad de la infraestructura.

Automóviles y siderurgia

El Gobierno Vasco ha desarrollado un modelo de demanda en el que prevé que la intermodal capte una parte sustancial de la mercancía no contenorizada que pase por el corredor Atlántico, especialmente automóviles, productos siderúrgicos, agroalimentarios y manufacturas. En este sentido, señala que el mayor intercambio en el citado corredor se produce entre las regiones del noroeste peninsular (principalmente el País Vasco) y norte-suroeste de Francia (Aquitania). Además, se estima que puede captar la mitad del tráfico de contenedores existente en el corredor, debido a la influencia de la futura plataforma intermodal de Jundiz.

En consecuencia, el Ejecutivo autónomo considera que la intermodal «puede cubrir las funciones de centro de operaciones ferroviarias transfronterizas y del puerto, zona de actividades logísticasasí como soporte para la industria y distribución regional».

El Gobierno Vasco apuesta por esta infraestructura como una oportunidad para potenciar Euskadi como eslabón clave del corredor Atlántico. En este sentido, el viceconsejero de Transportes, Antonio Aiz, señala que «nos situamos en la zona de tránsito entre los mercados peninsulares y el resto de Europa, dentro de un área de influencia de más de 2.000 kilómetros y que conecta diez regiones de la UE, donde residen 80 millones de habitantes, el 25% de la población de la zona euro».

El viceconsejero señala que la ubicación del País Vasco, unida a la existencia de una red de infraestructuras logísticas y de transportes de primer orden, «perfectamente coordinadas e interconectadas entre sí y con las grandes redes europeas, convierten a Euskadi en una plataforma logística multimodal insustituible para la accesibilidad de personas y el transporte de mercancías en el sudoeste de Europa».

Aiz subraya que la plataforma de Lezo supone una pieza fundamental «para el desarrollo socioeconómico, el progreso y la mejora de la competitividad, así como un impulso fundamental para Pasaia, gracias a la conexión ferroportuaria».

Fuente: El Diario Vasco