NOTICIAS - El sindicato ferroviario augura la privatización del tren Directo

Frente al mutismo del ministerio de Fomento respecto al futuro del tren directo y el estudio económico financiero para determinar la viabilidad de la línea -que debería haberse conocido hace tres meses, tal y como anunció la responsable del Departamento, Ana Pastor-, el Administrador de Infraestrcuturas Ferroviarias (Adif) ha sido la única entidad que se ha pronunciado intermitentemente sobre este asunto.

Sin embargo, las noticias nunca han sido buenas. Si a principios de año se comunicó un cierre temporal que hizo temblar a las plataformas que luchan por la reapertura; a lo largo de la última semana, la empresa se ha puesto en contacto con los sindicatos ferroviarios para comunicarles su intención de reubicar a los cinco empleados que actualmente trabajan en la estación Montecillo.

Aunque la información proporcionada a los representantes de los trabajadores ha sido escasa y la notificación se limita a convocar una reunión para «iniciar una acción de movilidad geográfica colectiva tras la supresión de los puestos de factura, circulación y servicio itinerante»; desde los sindicatos sostiene que se trata de un cierre de la línea pues «los operarios se incorporarán a otros puestos en otra localidad. Previsiblemente en Rosa de Lima, en Burgos», apuntó el secretario general de CCOO, Juan Carlos Muiño.

Además, considera que se trata de «un nuevo plan de privatización del Gobierno». En este sentido, subrayó el sin sentido que supone tomar este decisión después de haber mantenido a la plantilla durante casi cuatro años en los que no ha habido circulación. Motivos a los que se suma el inicio de las obras del ramal ferroviario en el polígono industrial Prado Marina. «Alguien nos tendrá que explicar porqué se hace esto justo ahora cuando empieza a asomar la cabecita de la producción», sostuvo.

¿Y el ramal?

«¿Para qué se construye un ramal y se quita al personal? ¿No será que luego se pretende vender al mejor postor?», se autopreguntó. Aunque reconoció que no tiene respuesta para dichas cuestiones, reiteró su convicción acerca de que la finalidad es «la privatización pura y dura de la línea», opinó. «Esa es nuestra postura inicial con la poca información que nos han dado. Nuestro primer paso será exigir explicaciones», adelantó.

Podrán hacerlo esta semana, tal y como les comunicó Adif en la notificación. Documento en el que también alegan algunos motivos para argumentar la reubicación de los cinco operarios de Aranda. Entre ellos incluyen «la inviabilidad de mantener a la plantilla en la estación por la ausencia de circulación de trenes desde el año 2012». Alegato que, a juicio de los sindicatos, no tiene mucho peso y llega con dos años de retraso: «Si no pasan trenes es porque ellos no han querido o no han sabido negociarlo», sentenció, y tachó de «incomprensible» la actuación de la empresa.

Fuente: Diario de Burgos