jueves, 16 de febrero de 2017
NOTICIAS - La dignidad de las víctimas rompió el silencio
Fue, y todavía hoy lo es, el peor accidente de metro de la historia de España, pero a los pocos días se empezó a dejar de hablar de la tragedia que se vivió en València el 3 de julio de 2006. Ese manto de silencio, apenas arañado por algunos medios, duró casi siete años pero finalmente se resquebrajó. La dignidad y la persistencia de los familiares de las víctimas y de los heridos acabaron por romperlo y ahora un documental aporta un relato a esa década de lucha por conocer la verdad y encontrar a los responsables. "Lo que queríamos contar era su capacidad de resistencia", explica Vicent Peris, director de la película. "Queríamos aportar la historia completa porque su lucha es un ejemplo para todos los casos de accidentes en los que ha estado involucrada la Administración pública", señala.
Pero ‘La estrategia del silencio’, que este martes se ha estrenado en el Humans Fest de València, apuntala también, mediante la acumulación de indicios, la teoría de que hubo una acción organizada para silenciar lo ocurrido, que surgió al Gobierno autonómico del Partido Popular y que involucró a RTVV. Primero fue para no ensombrecer la visita del Papa que hubo seis días después y más tarde para escurrir cualquier responsabilidad política, señala la película. "Hay demasiadas coincidencias como para no pensar que hubo una estrategia detrás. Que el 'conseller' y Canal 9 repitieran insistentemente justo las mismas palabras, ‘inevitable’ e ‘impredecible’, no puede ser casualidad. O que a los dos días ya estuvieran ofreciendo indemnizaciones. Todo eso te hace pensar que hay un ideólogo. Si la pregunta es si pensamos que todo respondía a una estrategia, la respuesta es sí", explica Peris.
Soledad
El documental muestra cómo ese perverso plan estuvo a punto de salir bien puesto que los afectados pronto se encontraron solos. Apenas un centenar de personas secundaban sus movilizaciones mensuales. "Por parte de la sociedad fue una respuesta indigna, también la nuestra", asume Peris, que destaca que esa soledad afectó a los miembros de la asociación pero no les doblegó. "Cuando nosotros llegamos en el 2012 los ánimos estaban muy bajos pero no pensamos que lo fueran a dejar porque si no ya lo habrían hecho", recuerda. Pocos meses después las víctimas lograron que el 'Salvados' de Jordi Évole contara su historia con un programa que removió conciencias, apuntó con el dedo a algunos de los responsables y llenó la plaza que había visto pasar casi indiferente cerca de setenta concentraciones. "Si ellos no hubiera seguido cada día en la plaza no habría habido 'Salvados'", subraya Peris. "Se podían haber ido a casa con la indemnización, que es lo que habríamos hecho casi todos, pero querían que respuestas y asegurarse que algo así no iba a volver a pasar", destaca. "Ellos sostenían la dignidad de la sociedad civil y ver que se llenaba la plaza fue reconfortante para ellos", remarca.
Punto de inflexión
Aquel programa fue un punto de inflexión en una lucha que encontró recompensa tras el cambio de Gobierno en la Comunitat Valenciana en el 2015. "Pasaron página porque el primer acto fue una petición de perdón, que era lo que buscaban. Cerraron el duelo y la etapa de rabia", afirma. Aun así, el documental recuerda que la vía judicial no está cerrada y, de manera sutil, vuelve a pedir que cuenten lo que saben los trabajadores de Ferrocarrils y los extrabajadores de Canal 9 que todavía no han dado el paso. "Hay gente que tiene cosas que decir y esperamos que en algún momento hable, aunque sea por remordimientos", desliza Peris. Eso podría ampliar el largometraje pero la victoria de la resistencia y la dignidad ya está contada.
Fuente: Periódico elPeriódico